La resaca de las elecciones y la verdad tras las propuestas de campaña
No obstante que en 2018, los partidos políticos están recibiendo del INE 6,788 millones de pesos, investigadores y analistas políticos como Luis Carlos Ugalde (Ex presidente del IFE) y María Amparo Casar, Doctora en Ciencias Políticas y Sociales , por la Universidad de Cambridge, manifiestan que de cada peso que se reporta como gasto de campaña, el gasto real es de quince pesos, es decir, Si los partidos reportaran como gasto de campaña los 6,788 millones de pesos, el supuesto gasto real sería de 101,820 millones de pesos, los cuales saldrían no solo de las prerrogativas asignadas por el INE, sino de financiamientos que hacen tanto empresarios como la delincuencia organizada, lo cual obliga a los funcionarios públicos electos, a tener componendas o bien dar beneficios o concesiones a estos grupos.
Como se puede ver, existe un dispendio descomunal en el gasto para las campañas, que bien pudiesen servir para apoyo a las clases más necesitadas o inversiones en infraestructura en comunidades rurales como el suministro de agua, etc.
Lo anterior mencionado es para poner en contexto, el tamaño de los beneficios que obtienen los partidos políticos y que en la realidad, representan ante los ojos de los ciudadanos, verdaderos nichos de poder y corrupción, ya que la prioridad no es el pueblo, sino el enriquecimiento de sus agremiados teniendo como resultado que “el producto estrella” de los grupos que gobiernan el país es la pobreza y cuyo vehículo del gasto opaco y sin control son los programas sociales. En los últimos tres años han operado 5 mil 491 programas sociales en el país, pero sin coordinación entre ellos, e incluso 37 están duplicados. De los implementados por el gobierno federal, sólo 83 están enfocados en abatir las carencias sociales y son considerados prioritarios para cumplir con ese objetivo. Esto “dificulta el éxito de la política social”, lo cual es una conclusión del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL).
La resaca de las elecciones
Después de que concluya el proceso electoral, con un descomunal bombardeo publicitario, sesgo y apoyo de algunos medios masivos de comunicación hacia candidatos y partidos políticos, que ha propiciado divisionismo en la sociedad, hasta la pérdida de amistad o relación entre los ciudadanos, convendría hacer un acto de reflexión, sobre las propuestas de los candidatos que elegimos y dar un seguimiento puntual a su cumplimiento; Cada vez más, tenemos más ciudadanos informados, lo cual ha hecho que se medite o analice el voto; No obstante ello, Existe una gran cantidad de ciudadanos que viven en la pobreza y que con dádivas como despensas, pagos u otros beneficios, inclinan su voto hacia los partidos que lo propician y con ello, nuevamente corroboramos que la pobreza es el producto estrella de los que gobiernan el país.
Son tiempos de cambio y los ciudadanos debemos ser los agentes que exijan reformas a la ley y a las políticas públicas en pro de los ciudadanos y qué a su vez, erradiquen las condiciones de opulencia que tiene la clase política y señalar los casos de corrupción e impunidad que identifiquemos en nuestras localidades.
Existen instituciones públicas como la Auditoría Superior de la Federación, que son las encargadas de supervisar, fiscalizar y auditar el desempeño de las entidades públicas y sus funcionarios, identificando desvíos u opacidades en el gasto público; Una de las sugerencias que su servidor haría para el nuevo gobierno e instituciones como la ASF, es lanzar programas que permitan a los ciudadanos, encausar posibles irregularidades en los gobiernos municipales, estatales o federales; El programa lo llamaría “NO TE HAGAS DE LA VISTA GORDA” y que contaría con una infraestructura de comunicación que permita a los ciudadanos efectuar sus denuncias, tomándolas como anónimas para evitar represalia alguna.
La verdad tras las propuestas de campaña
Los candidatos actuales, han emitido propuestas de campaña que en realidad son muy generales y no presentan un Plan Estratégico que diga Cómo, Cuando, Con qué y el impacto costo beneficio en pro de la ciudadanía y específicamente, cual será el gasto para llevarlas a cabo, es decir, ¿Aumentarán la deuda pública de su Municipio, Estado o de La Federación?, ejemplo, la deuda pública de nuestro país se ha duplicado de 2012 a 2017; En 2012 era de 5.4 billones de pesos y al cierre de 2017 fue de 10.88 billones de pesos.
En conclusión, Si la mayoría de los ciudadanos seguimos manteniéndonos al margen del desempeño de los gobiernos, no esperemos resultados diferentes y por tanto seguiremos viendo como se deprecia nuestro poder adquisitivo y como se incrementan los niveles de pobreza.
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